Ante la Asamblea de Santander
La cartera de Agricultura dirigida por Darío Echeverry Serrano, presentó ante los Diputados de Santander, los avances y gestiones adelantadas por la Administración Departamental, en pro de la situación que por largo tiempo ha venido presentando la comunidad de paneleros de la Hoya del río Suarez, quienes con dificultad adelantan sus labores del campo.
La raíz del problema se centra en la sobreproducción de la caña, “el debate se presentó luego de identificar una sobreproducción en el sector, generada por unas promesas falsas de la creación de una planta de alcohol carburante en el municipio de Guepsa, que iba a necesitar más caña; la gente creyó y salió a sembrar mucha más caña, sin una demanda del mismo nivel. Este importante tema que se planteó en la asamblea no es hacia el gobierno departamental, es mas al gobierno nacional frente a la crisis panelera”, agregó el secretario de Agricultura.
Dicha situación ha generado que el kilo de panela que en el año 2.007 se estaba pagando a $1.528, hoy se esté pagando a $720 ó $750, el punto de equilibrio esta sobre el orden de los $9.00, perdiendo de esta manera el sector panelero de la región.
Por su parte, Echeverry Serrano, señala que son tres las fallas identificadas que actualmente se presentan, entre ellas las coyunturales que son de oferta y demanda, el otro estructural que se relacionan al modelo de producción, y la falta de institucionalidad en el proceso, “no hay gremios fuertes, los santandereanos nos preocupamos por esta crisis, pero la crisis es nacional”.
“Santander tiene mil trapiches, aquí todavía tenemos la producción tipo de colonia, donde el productor tiene toda la cadena, el tiene el vivero, cultiva, muele y saca la panela, ese modelo hemos propuesto cambiarlo al modelo de la palma que produce, saca su fruto y se lo vende a las extractoras, eso no quiere decir que no sea socio de los nuevos trapiches, de la comercialización”, manifestó el funcionario.
Actualmente, un trapiche tiene un valor alrededor de los $1.200 millones para que pueda cumplir con los requisitos del Invima y trabaja cerca de 2 meses al año, no siendo rentable esta inversión para un trabajo de corto tiempo, agregado a esto la producción se recoge después de los 14 o 15 meses de la siembra.
Ante esta situación, Darío Echeverry indicó que la idea es que el trapiche produzca todo el año con una acción planificada y así generar mayor productividad.
“Un trapiche nuevo basado en vapor, produce un 40 % más de jugo de caña que es la materia prima para la panela, y los trapiches que actualmente tenemos que son de $120 o $200 millones, no producen en esas condiciones. Cuando se les habla a los paneleros de modernización, no les gusta mucho, es una cultura muy fuerte pues llevan 150 años en este negocio heredado”, expresó el secretario de Agricultura.
Las ayudas que se han solicitado al Gobierno Nacional, se centran en la facilidad de créditos blandos a los productores, generando precios de sustentación, y facilitar una política que pueda mejorar la demanda para de esa manera equilibrar la producción y la gente no siga perdiendo.
El mercado con miras a la exportación, no se ha podido llevar a cabo por la falta de equipos modernos que cumplan con las exigencias del mercado internacional.
“En Santander el año pasado dejamos de recibir más de 53 mil millones de pesos por bajos precios en la panela, esto aporta 6.600 millones de pesos en salarios a 350 mil jornales año, aportando casi el 10% al producto interno bruto agropecuario. En el gobierno del Dr. Serpa Uribe, estamos con toda la disposición de acompañar esta crisis que es del orden nacional, pero que nosotros tenemos que afrontar también”, concluyó Echeverry Serrano, secretario de Agricultura.
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